Ya vuelvo a sonreír, después de varios días sin historias.
Desde luego lo del disco Plinsoll se ha escrito mucho, lo más gracioso es que el Ría De Ares venía avalado por el Lloyd Registre, pero muchas veces—demasiadas—te saltabas una línea, pero sin querer a lo mejor hasta toda la decorativa pintura que estaba sobre unas marcas grabadas en la plancha del costado. Bien lo dices Elías, ¡Ay si los discos hablaran!
Me ha gustado, como todo lo que escribes sobre ese fantástico relato navegación, como profesional me has hecho vivirlo de nuevo. Me has recordado un hecho real que me sucedió camino de Matadi en el Kauldi, yendo de segundo piloto y en mi guardia de 00-04, disfrutaba a la altura de la Isla de Annobón, de una noche oscura con tormenta eléctrica silenciosa cuyos múltiples rayos alumbraban por unos segundos todo el horizonte, la claridad llegaba hasta dentro del puente, el timonel era un hombre sencillo y algo supersticioso, en estos breves destellos le descubrí santiguándose y murmurando unos rezos, y de repente se forma por la proa del palo una bola de fuego que describe un trayecto alrededor de barco para desaparecer con un chasquido por la amura de estribor, es verdad amigos, el compás del timonel se quedó dando vueltas lo mismo que el magistral situado arriba del puente haciendo imposible llevar el rumbo durante unos minutos, cuando se detuvieron temí una descompensación magnética, pero la oscuridad de la noche y el deslumbramiento que sufrías me era imposible tomar como referencia la estrella Polar que aún la tenía por encima del horizonte, así como quedaba unas horas para el amanecer llamé por el acústico al viejo para ponerle al corriente, me parece que obvio el percance , me dijo que ya había pasado por este fenómeno otra vez y que cuando saliese el sol ya se comprobaría la corrección total .
Estas Centellas o rayos globulares no son muy frecuentes pero ocurren durante fuertes tormentas con gran aparato eléctrico en cualquier lugar mar o montaña, recuerdo que veranando en una localidad de montaña de Valencia, Serra, un grupo de excursionistas en el castillo moruno que corona el pueblo sufrieron un percance por este fenómeno estando cobijados dentro del recinto, entro la centella por un hueco y salió por otro conmocionando a todos ellos, incluso con quemaduras.
Y Ahora como se recuerda a un niño repelente: ¿Que se dice a estos señores? con una entonación musical ”Buenas fiestas tengan Vds”.
Hasta the next time. Juan/EA5HL
Desde luego lo del disco Plinsoll se ha escrito mucho, lo más gracioso es que el Ría De Ares venía avalado por el Lloyd Registre, pero muchas veces—demasiadas—te saltabas una línea, pero sin querer a lo mejor hasta toda la decorativa pintura que estaba sobre unas marcas grabadas en la plancha del costado. Bien lo dices Elías, ¡Ay si los discos hablaran!
Me ha gustado, como todo lo que escribes sobre ese fantástico relato navegación, como profesional me has hecho vivirlo de nuevo. Me has recordado un hecho real que me sucedió camino de Matadi en el Kauldi, yendo de segundo piloto y en mi guardia de 00-04, disfrutaba a la altura de la Isla de Annobón, de una noche oscura con tormenta eléctrica silenciosa cuyos múltiples rayos alumbraban por unos segundos todo el horizonte, la claridad llegaba hasta dentro del puente, el timonel era un hombre sencillo y algo supersticioso, en estos breves destellos le descubrí santiguándose y murmurando unos rezos, y de repente se forma por la proa del palo una bola de fuego que describe un trayecto alrededor de barco para desaparecer con un chasquido por la amura de estribor, es verdad amigos, el compás del timonel se quedó dando vueltas lo mismo que el magistral situado arriba del puente haciendo imposible llevar el rumbo durante unos minutos, cuando se detuvieron temí una descompensación magnética, pero la oscuridad de la noche y el deslumbramiento que sufrías me era imposible tomar como referencia la estrella Polar que aún la tenía por encima del horizonte, así como quedaba unas horas para el amanecer llamé por el acústico al viejo para ponerle al corriente, me parece que obvio el percance , me dijo que ya había pasado por este fenómeno otra vez y que cuando saliese el sol ya se comprobaría la corrección total .
Estas Centellas o rayos globulares no son muy frecuentes pero ocurren durante fuertes tormentas con gran aparato eléctrico en cualquier lugar mar o montaña, recuerdo que veranando en una localidad de montaña de Valencia, Serra, un grupo de excursionistas en el castillo moruno que corona el pueblo sufrieron un percance por este fenómeno estando cobijados dentro del recinto, entro la centella por un hueco y salió por otro conmocionando a todos ellos, incluso con quemaduras.
Y Ahora como se recuerda a un niño repelente: ¿Que se dice a estos señores? con una entonación musical ”Buenas fiestas tengan Vds”.
Hasta the next time. Juan/EA5HL